Mientras espero con impaciencia la llegada vía Amazon del nuevo libro de Sam Tanenhaus, director del New York Times Book Review, “The death of conservatism” (“La muerte del conservadurismo”), acabo de leer una referencia al nuevo libro, que digo yo que será de lectura obligada, de Manuel Castells, “Communication power”.
El libro en cuestión debuta primero en versión inglesa y espero que pronto aparezca la versión en español que imagino publicará Alianza Editorial.
Castells se ha convertido en el teórico más influyente y analista de las comunicaciones modernas en la era de las nuevas tecnologías. Ha llegado a ser calificado como el Marshall Mcluhan de nuestro tiempo, sobre todo por el libro que el canadiense publicara de “La Galaxia Gutenberg” en 1962 y que el español prosiguiera con astucia en su “La Galaxia Internet” en 2001.
Por las referencias que he podido leer, su último libro analiza el poder financiero y político ejercido a través de los medios de comunicación. El libro es la obra de un activista que estimula al uso de las nuevas tecnologías por parte de los ciudadanos, Internet por encima de todo, pero también el uso del móvil, para construir el poder ciudadano, en oposición al establishment político y empresarial.
Según Castells, el poder en esta “galaxia” se obtiene por apoyar una forma de poder con otras. Sin embargo, dentro de esta tesis, uno de los temores que me provoca la galaxia de Castells son las intenciones de los de siempre por mantener su statu quo, por impedir que sean las nuevas iniciativas quienes irrumpan en el nuevo ecosistema, por ser ellos quienes controlan los cambios y manejan los tiempos, por evitar que la Red sea de todos. En definitiva, se trata de los mismos perros con diferente collar.